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La UICMA (United International Cigar Manufacturers Association) es una asociación independiente que representa a empresas de todo el mundo, dedicada a la tradición de los puros elaborados con 100% tabaco. Nuestro enfoque se centra principalmente en los puros premium hechos a mano y en productos auténticos que respetan la artesanía, la herencia y el valor cultural.
A diferencia de las alternativas producidas en masa, estos puros no están destinados a atraer a nuevos o jóvenes consumidores, sino que están arraigados en tradiciones de larga data y en un disfrute responsable. La UICMA busca dar una voz clara y equilibrada a este segmento, asegurando que su carácter único sea reconocido y tratado de manera justa en la política pública y en la regulación.
Los desafíos que enfrentamos
Los puros premium hechos a mano son fundamentalmente diferentes de otros productos de tabaco o nicotina. Están elaborados con hojas de tabaco 100% naturales, enrollados a mano con cuidado y tradición, y destinados a consumidores adultos responsables. Estos puros no se comercializan para jóvenes, no están aromatizados ni diseñados para ocultar su verdadera naturaleza, y se disfrutan con moderación de la misma manera que un vino fino o un licor añejo.
A pesar de ello, nuestra industria se enfrenta cada vez más a regulaciones estrictas que fueron diseñadas originalmente para abordar los problemas de los cigarrillos producidos en masa y de los modernos productos desechables de nicotina. Los productores de puros hechos a mano están ahora obligados a registrar cada formato y detalle de envasado en los sistemas gubernamentales, pagar tasas significativas y aplicar normas de empaquetado genérico que borran la presentación auténtica de un producto cultural. Además, los sistemas de trazabilidad, creados para la producción industrial a gran escala, se imponen a pequeñas fábricas familiares cuya producción anual es mínima en comparación.
Esto resulta en una carga desproporcionada para los fabricantes tradicionales de puros y sus importadores. Mientras que las empresas multinacionales pueden adaptarse rápidamente, los pequeños productores se ven obligados a absorber los costos y las exigencias administrativas que amenazan su propia supervivencia. Irónicamente, esas mismas regulaciones a menudo no logran impedir que los productos modernos de vapeo, de colores llamativos, sabores artificiales y promocionados en plataformas dirigidas a los jóvenes, lleguen a los consumidores menores de edad.
La UICMA considera que la auténtica artesanía no debe tratarse como una amenaza para la salud pública. Se necesita un enfoque más equilibrado y justo, uno que distinga entre productos patrimoniales disfrutados por adultos y las alternativas de mercado masivo que impulsan el consumo de nicotina en los jóvenes. Sin esta distinción, siglos de tradición corren el riesgo de perderse y los productores responsables son castigados por problemas que no han creado.